Y es que a veces, por mucho que lo intentemos, cuadrar agendas para quedar a correr con un amigo se hace difícil, pero no imposible. Siempre dejamos una puerta abierta, porque sabemos que al final lo conseguiremos.
Y es que a veces, por mucho que lo intentemos, cuadrar agendas para quedar a correr con un amigo se hace difícil, pero no imposible. Siempre dejamos una puerta abierta, porque sabemos que al final lo conseguiremos.